"El primero de enero de 1994, en medio del
baile transnacional por la entrada en vigor del Tratado de Libre
Comercio, un grupo de indígenas armados tomó varias cabeceras
municipales en Chiapas y lanzó un canto de guerra zapatista con la
Primera Declaración de la Selva Lacandona, arruinándole la fiesta al
chambelán neoliberal, Carlos Salinas de Gortari. Después de varios días
de combates, la sociedad mexicana tocada por el justo reclamo de los
pueblos indígenas (trabajo, tierra, techo, alimentación, salud,
educación, independencia, democracia, justicia y paz), logró que el
gobierno federal decretara un “alto al fuego” y semanas después que se
realizaron los diálogos de paz en la catedral de San Cristóbal de las
Casas.
La táctica político militar zapatista
resultó perfecta; arruinó la falsa grandilocuencia salinista, logró en
horas posicionar el tema de la injusticia social contra los indígenas y
consiguió un efecto mediático poderosísimo: apareció el primer
movimiento anticapitalista y antisistémico global después de la caída
del muro de Berlín y del bloque socialista. Así de lejos llegó la
pedrada: un grupo de indígenas y mestizos —desde la Selva Lacandona—
saltó a la escena mundial para cuestionar el triunfalismo del
capitalismo, que declaró al ‘mercado’ como el nuevo dios que regiría a
la humanidad con su mano invisible y poderosas corporaciones.
Después del primero de enero de 1994 el
EZLN, su Comité Clandestino Revolucionario Indígena, Comandancia General
(CCRI-CG) y su ‘vocero’ el Subcomandante Marcos iniciaron una ofensiva
mediante la fuerza de la palabra que deshojó la mazorca neoliberal y
evidenció que el proyecto salinista tendría como objetivo final el
exterminio de los pueblos indios y de todos aquellos que no tuvieran
capacidad de consumo. La ofensiva de los ‘comunicados’ zapatista tuvo
repercusiones mundiales y fue la primer guerrilla virtual de la historia
moderna. Su discurso heróico unificó en el mundo a los grupos
anticapitalistas que habían quedado en la marginalidad ideológica
después del derrumbe de las ideologías o del falaz ‘fin de la historia’."
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