Apuntes teóricos del cerebro de la República de la Televisión:
El presidente, como jefe de las fuerzas armadas, habrá de tener todos los efectivos militares a su disposición para defender la nueva constitución republicana. En tales condiciones, la llave de la situación estará en nuestras manos y ningún otro podrá dirigir al poder legislativo. Al introducir la nueva constitución republicana televisiva, con el pretexto de salvaguardar el secreto político, despojaremos a la cámara del derecho de interpelación. Si, contra toda expectativa, se despertasen aun pasiones entre este pequeño número de representantes, apelando a la mayoría del pueblo, los reduciremos a nada.