AMLO en la ONU: el salinismo contraataca

Sergio Humberto Brown Figueredo

Ir a Nueva York al setenta aniversario de las Organización de las Naciones Unidas y utilizar la tribuna para soltarle flechazos discursivos a López Obrador, no se si es un despropósito, pero si una estrategia:

"Con las crecientes desigualdades, con una crisis económica mundial que no cede y con la frustración social que esto provoca, el mundo de hoy está expuesto a la amenaza de los nuevos populismos (...) de izquierda y de derecha, pero todos riesgosos por igual".

Fue al extranjero con dinero público a realizar un acto de campaña contra el populismo, es decir contra ¡López Obrador!, que sin ser Presidente, se coló de fantasmazo en la máxima tribuna internacional.

Las elecciones intermedias son el inicio de la carrera presidencial, y desde meses atrás. Carlos Salinas y su banda se articulan para vencer de nuevo, por las buenas o por las malas, a su verdadero adversario político electoral: AMLO.

La semana pasada se supo que el innombrable está detrás del fenómeno de las candidaturas independientes (se habla de Jorge Castañeda, Juan Ramón de la Fuente y el Bronco de Nuevo León), sumado a que ya controla todos los partidos restantes a excepción de MORENA.

A Peña Nieto intentarán moverlo con pinzitas, su popularidad está en el punto más bajo, y como en su momento con Vicente Fox, ya siendo un cartucho político quemado, utilizarán la presidencia para lanzar ofensivas de Estado contra López Obrador.

El título de Secretaria de Relaciones Exteriores adjudicado a la sobrina de Carlos Salinas les da amplio espectro de manipulación del espacio (político) exterior. Reforzarán su alianza con los gobiernos neoliberales de derecha, teniendo en la Ruiz Massieu la interlocutora 'real' del poder detrás del poder.

En la política interna del país, existe un poder mancomunado entre los duros de la Secretaría de Gobernachong y los altos mandos de la seguridad en México (Policía Federal, Ejército y Marina). En esas acciones de coerción, muerte o desaparición, Peña Nieto es la careta perfecta para la obra que disimula, mediáticamente, lo que opera en la sombra: una maquinaria bélica que es un negocio multinacional. Y lucharán con todo, y entre todos para mantenerlo.