El porro

¿Cómo puede ser posible que se siga considerando "periodista" a un porro como Ciro Gómez Leyva? Un hombre (des)fazado, que congruente con los intereses de sus relaciones amistosas, se ha convertido en persecutor de las causas populares, y de los movimientos sociales que se inconforman ante la injusticia, la ilegalidad y los abusos de la mafia que ostenta el poder en México. Él, como periodista, se pudiera mantener "en el medio", ( y ser una voz comunicante), pero al asumirse como "detractor", es un activo político, un golpeador con micrófono. Dice Gómez Leyva al aire, --hecho un tonto--, que "López Obrador buscaba con los plantones de Reforma la insurreción y nadie lo siguió", cuando en "la realidad", el plantón de Reforma distendió "los ánimos bélicos" que generó Vicente Fox con su intervención ilegal en la elección y con el fraude electoral.

Pero para un "porro ciego" las razones políticas de la oposición son insuficientes.

Él sólo puede "leer" comunicados de gobierno.