Maciel S.A. de C.V.

Terrible cobertura de La República de la Televisión al caso Marcial Maciel. Crispante. Joaquín López Dóriga en Fórmula de la Tarde leyó completa la carta respuesta de los Legionarios de Cristo y no transmitió los graves señalamientos de agresión sexual que los hijos de Marcial Maciel le narraron a Carmen Aristegui en MVS . El vocero 'mochó' el caso, censuró una de las partes y desinformó a millones. El vocero defendió con toda su unidireccionalidad la versión del poder (el agresor sexual) y censuró a la parte agredida (los hijos violados por Maciel). Una vez más los micrófonos impunes de La República de la Televisión al servicio de la perversa oligarquía nacional.

Monerohernández

Apapachos entre voceros

"Tú eres reportero y los reporteros son los mejores periodistas del mundo."
Carlos Marín a Joaquín López Dóriga en spot de Radio Fórmula.

A Los Voceros de La República de la Televisión:

"Con el anzuelo de la mentira pescarás la verdad. Que así es como nosotros los que tenemos talento y prudencia solemos conseguir por indirectas el fin directo, usando de artificios y disimulación. "
William Shakespeare. Hamlet.

La historia de las cosas

El mundo en que las cosas no duran: obsolencia programada y obsolencia percibida.

Capitalismo: el más grande engaño que la humanidad haya vivido jamás.

Cada habitante de Estados Unidos consume tres mil anuncios por día.

Principio capitalista: entre más cosas tienes, más infeliz eres.

La tríada del capitalismo: trabajar, mirar, gastar. Al infinito.

Conclusión: el capitalismo no está produciendo el bienestar del pueblo.

El no humano

"Juan Pablo II fue íntimo amigo de mi papá: podemos pensar que hubo mucha relación Vaticano-Iglesia con la Congregación."
Hijo de Marcial Maciel

Los Legionarios de Cristo están en el epicentro de un conflicto terminal: su 'padre' fundador no solo asaltó sexualmente a cientos de niños inocentes, atacó a sus propios hijos. Marcial Macial no fue humano. El escándalo legionario se transforma en indignación, en prueba madre de la decadencia del cosmos impuesto en México. La larga noche de los quinientos años fue el reino impune de los monstruos encubiertos como Marciel Maciel.

Así lo publica hoy La Jornada:

"La familia que formó el sacerdote Marcial Maciel en México reveló ayer los excesos y abusos sexuales cometidos por el fundador de la Legión de Cristo. Tres de sus hijos: Omar, José Raúl y Christian González Lara, junto con su madre Blanca Estela Lara Gutiérrez, lo retrataron como un gran mentiroso, usurpador de personalidades, manipulador y un hombre que cometió actos de pedofilia con dos de sus vástagos.

En la primera entrevista que conceden a un medio de comunicación, en la radio con Carmen Aristegui, dieron cuenta de cómo la alta jerarquía eclesiástica se ha negado a reconocerlos como hijos de Maciel, aunque Álvaro Corcuera, actual superior de los legionarios de Cristo, ha tenido comunicación con ellos, y exigieron al Vaticano resarcir del daño a todas las víctimas de abuso sexual cometidos por integrantes de esa orden religiosa.

Blanca Estela conoció a Maciel en Tijuana, Baja California, cuando ella tenía 19 años de edad y un hijo, y él 56. Le dijo que era viudo y buscaba una muchacha para casarse. Nunca cumplió esa promesa, pero mantuvieron una relación de 25 años durante los cuales prevalecieron los engaños y las perversiones del sacerdote. Primero le dijo que se llamaba José Rivas, que era detective privado, luego que era de la CIA, y puras mentiras: así me llevó todo el tiempo, y yo le creí."
[...]
"A Omar y José Raúl los hizo víctimas de abuso sexual durante ocho años. "Mi primer abuso sucedió en Colombia, cuando yo tenía 7 años de edad. Yo estaba acostado con él, como cualquier niño, como cualquier hijo de familia con su padre a esa edad. Me baja el calzoncillo y me intenta violar. Por instinto humano reacciono y me muevo. Se da cuenta; no me fuerza, pero fue tan fuerte el impacto que hasta el día de hoy recuerdo qué desayuné ese día".
[...]
“Siempre nos decía que a él le dolía mucho la pierna, que durmiéramos al menos uno de los dos siempre con él, con el afán de que –nos decía– cuando tienes un dolor en los huesos, ‘caliéntenme la pierna porque me duele mucho…’ en Barcelona, de momento nos decía: ‘dense un beso’, pero por qué…”.

La entrevista de la esposa y los hijos de Marcial Maciel con Aristegui, en MVS:
















El no humano ha quedado al descubierto.

Hamlet hertziano:

La República de la Televisión, aun cuando nadie la combata, halla en sí misma su propio enemigo.