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¿Qué guerra buscan? En el momento más crítico de su (des)gobierno, los diputados de La República de la Televisión le dan vida 'constitucional' a los contratos riesgo e inician la ofensiva para 'dividir', legalmente, las ganancias de nuestro petróleo con las compañías extranjeras. En la media noche del proyecto simulador, con la economía (auto)explotada, con la molestia efervesciendo por el desmedido costo de lo básico: el Imperio de Gortari inicia el movimiento para la entrega final de los recursos energéticos nacionales a los extranjeros.

Así lo reportó La Jornada:

"En una concertación que incluyó a los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN), Nueva Alianza (Panal), Verde Ecologista de México (PVEM) y Convergencia, el Revolucionario Institucional (PRI) impidió que la Cámara de Diputados interpusiera una controversia constitucional solicitada por el Partido del Trabajo (PT) contra las disposiciones administrativas de Petróleos Mexicanos (Pemex) que permiten otorgar contratos a particulares para participar en toda la cadena de producción de hidrocarburos."

En to-da-la-ca-de-na-de-pro-ducc-ión: en-to-da. Bloquearon la controversia, por lo tanto 'es constitucional'. Los tiburones petroleros se están saboreando su próximo y desmedido atasque: los contratos riesgo. En respuesta, los verdaderos representantes populares tomaron la tribuna y evidenciaron la maniobra entreguista. Las palabras del perredista Guadalupe Acosta Naranjo, las utilizaremos para definir a un izquierdista vendido: "el reglamento de la paraestatal se apega a la Constitución y no existen riesgos de entregar la renta petrolera a trasnacionales". Entreguista (lo define el diccionario de la lengua española), es la 'tendencia a vender los intereses patrios a intereses extranjeros'. La República de la Televisión es un tornado entreguista.

Y ayer, en Fórmula de la tarde inició la ofensiva para esconder el saqueo. Dijo un vocero al aire: 'Desde hace semanas, López Obrador viene manteniendo en los Estados reuniones privadas con sus células'. Soltando al aire la programada relación de significado entre los comités de base del Gobierno Legítimo y las células del narcotráfico. Tienen tres años practicando la misma estrategia: los micrófonos, la pantalla y las columnas del más férreo defensor del régimen, Ciro Gómez Leyva, son la trinchera para atacar (sin derecho a réplica) un día sí y otro también a la Resistencia Civil Pacífica. Es la práctica hertziana del ser entreguista: tendencia a vender los intereses patrios a intereses (televisivos) extranjeros.