"Momentos de tensión se vivieron esta mañana en Cananea, cuando frente al hotel La Alameda, a dos cuadras de las oficinas del sindicato minero, 400 policías federales se formaron y realizaron lo que parecían preparativos para recorrer el kilómetro y medio que los separaba de las entradas a la mina. Los mineros se atrincheraron en los accesos y se realizó una asamblea informativa en la puerta 3. Los trabajadores, en huelga desde el 30 de julio de 2007, llegaron hasta ahí en vehículos a toda velocidad, sorteando las barricadas que ellos mismos instalaron durante estos meses y que sólo en pequeños automóviles se podían superar.
Durante la asamblea informativa en la que estaban presentes cientos de mineros, Jesús Feliciano Cibrián, segundo vocal del Comité Ejecutivo Nacional del sindicato minero, pidió a los trabajadores cuidarse de agresiones físicas durante el desalojo, a lo que en coro le respondieron con frases como duro, duro
o ni un paso atrás, ni un paso atrás
. Tras algunas horas en que los mineros aprovecharon para organizarse e incluso practicar el lanzamiento de bolas de plomo y piedras para defender lo que consideran es una huelga justa y legal, volvió la tranquilidad al disolverse la concentración de agentes federales, muchos de los cuales por la tarde de este miércoles recibieron licencia para vestir de civil y caminar por la ciudad."
No hay comentarios.:
Publicar un comentario