Es un país gobernado por remensos el que tiene como proyecto económico un motor importado no compuesto de piezas producidas en México, a excepción de la fuerza humana de esos millones de migrantes que trabajan en suelo extranjero prácticamente como esclavos, en la sombra o sin derechos. Y aquí el dilema punzante, Hillary Clinton es artífice del proyecto neoliberal mexicano, y el empresario Donald Trump, tiene como oferta central de su campaña a la presidencia de los Estados Unidos deportar a los mexicanos ilegales para recuperar los empleos que producen esos 13 mil 156.4 millones de dólares. Esa elección nos representa una trampa sin salida.
Por lo tanto, en caso de ganar Hillary Clinton el modelo neoliberal se profundizará hasta que reviente solo o se acabe México con otro fraude electoral en el 2018, y en caso de que el triunfador sea Donald Trump, en los próximos meses se podría acabar el flujo económico de las remesas que provocaron las políticas de los remensos y entraríamos a una crisis humanitaria sin igual; a una guerra entre nosotros por la sobrevivencia al estilo zombi apocalíptico, o a ser invadidos y aniquilados por una potencia militar extranjera para cobrarse el 'muro' con el territorio que queda.
Por lo tanto, en caso de ganar Hillary Clinton el modelo neoliberal se profundizará hasta que reviente solo o se acabe México con otro fraude electoral en el 2018, y en caso de que el triunfador sea Donald Trump, en los próximos meses se podría acabar el flujo económico de las remesas que provocaron las políticas de los remensos y entraríamos a una crisis humanitaria sin igual; a una guerra entre nosotros por la sobrevivencia al estilo zombi apocalíptico, o a ser invadidos y aniquilados por una potencia militar extranjera para cobrarse el 'muro' con el territorio que queda.
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