El 9/11 o nain wuan wuan

Para muchos seres humanos, su punto de interpretación sobre la realidad es inamovible. Las cosas son lo que aprendió en su familia, en la escuela, en los medios, en su experiencia o lo que dijo el cura de la telenovela (risas grabadas). Para otros no, los puntos de interpretación sobre la realidad se van moviendo con la duda, el saber, los sueños y la imaginación. Existen diferencias abismales entre interpretar la Historia con las versiones oficiales o no: 

¿El asesino solitario de Kennedy o una conspiración desde el poder? ¿El asesino solitario de Colosio, o una trifulca de Estado? 

Y de ese punto de interpretación nacen ramas de percepción y juicios que nos hacen pensar y creer que la realidad es una cosa u otra. Es lo mismo con el nain wuan wuan.

El 9/11 se le conoce al día que el "terror" atacó a Nueva York y al mundo. Múltiples cambios geopolíticos sucedieron al nain wuan wuan, también el número de las emergencias en Estados Unidos, 9-1-1. El capitalismo del shock saltó a la escena, la (sobre)realidad se apoderó de las pantallas y los noticieros, el mundo se retenizó en sus fronteras, se elevaron los proyectos de seguridad y surgieron múltiples guerras físicas e ideológicas contra "lo otro", "lo extraño", "lo religioso diferente". Una etapa de expansión territorial e ideológica que protagonizó, otra vez, Estados Unidos sobre su escenario, el mundo.
 
¿Y por qué se inició una guerra en Irak después de lo que pasó en Nueva York el 9/11, sin ser actos relacionables, más allá de una teoría construída por intelectuales para ver en el "otro" al enemigo? La respuesta la dieron después de que inició el bombardeo: "ups, aquí no existen armas de destrucción masiva"; y pues ya las trajimos nosotros. Y como ya estamos aquí: ¿qué les parece si les instauramos la democracia a balazos, nos quedamos con su petróleo y con las "figuritas" de sus museos?

Entonces ¿de qué se trató lo que pasó? ¿Quién escribió el guión?

El guionista cuando escribe, enfrenta las fuerzas del bien y el mal mediante protagonistas y antagonistas –en varias batallas–, hasta el éxtasis de las últimas consecuencias: la victoria o la derrota final, y siempre sabe: lo que escribe es ficción; y para que se lo crean muchas personas, lo narra lo más apegado a la realidad, a "la verdad". ¿Y si lo hiciera al revés?

Aquí "Loose change", un documental que plantea otros puntos de interpretación a la historia oficial sobre el 9/11 o "nain wuan wuan":