La oligarquía mexicana se caracteriza hoy por su abierto cinismo y desprecio por la verdad y el pueblo de México. Es ya de dominio público la intervención y complicidad de la tienda departamental Soriana en la ofensiva para comprar –a nombre de Enrique Peña Nieto– la Presidencia de México, y a pesar de ello, desde el submundo del autoengaño, en el papel de víctima y no de victimaria de la democracia, Soriana publicó el siguiente comunicado:
"Soriana hace un llamado a los actores públicos a la civilidad y paz social y que frenen la incitación a actos de violencia y división social.
En este mismo sentido señalan de forma particular a los señores Andrés Manuel López Obrador, Ricardo Monreal y Jesús Zambrano como responsables de todos los daños físicos y materiales, que tanto su personal como sus instalaciones pudieran sufrir en la ejecución de las manifestaciones que promueven e incitan, mismas que lamentablemente han intensificado su agresividad y violencia, causando molestias no sólo a colaboradores de Soriana, sino a miles de clientes que son diariamente obstruídos al momento de realizar sus compras.
Soriana exige frenar agresiones y publicidad negativa en contra de esa compañía, misma que afecta su imagen utilizando mentiras y argumentos sin sustento… las imputaciones que han hecho en contra de nuestra organización sin tener un solo elemento de prueba fehaciente, han generado una animadversión injusta hacia nuestro personal y operación comercial."
A lo que respondió AMLO en Twitter:
"Los dueños del PRI pensaron que podrían comprar la presidencia y ahora su dinero ilícito los está desnudando. No me culpen a mí. Serénense."
La irresponsabilidad de Soriana en el proceso electoral, en un país democrático le valdría severas multas y castigos y una ola de desprestigio comercial que, en México y su mundo político empresarial del revés, Soriana recibe apoyo de los medios masivos de comunicación, de sus voceros y los 'hombres de negocio', como si la empresa fuera una tienda 'ancla' de la democracia y no la vergüenza histórica que está detrás.
"Soriana hace un llamado a los actores públicos a la civilidad y paz social y que frenen la incitación a actos de violencia y división social.
En este mismo sentido señalan de forma particular a los señores Andrés Manuel López Obrador, Ricardo Monreal y Jesús Zambrano como responsables de todos los daños físicos y materiales, que tanto su personal como sus instalaciones pudieran sufrir en la ejecución de las manifestaciones que promueven e incitan, mismas que lamentablemente han intensificado su agresividad y violencia, causando molestias no sólo a colaboradores de Soriana, sino a miles de clientes que son diariamente obstruídos al momento de realizar sus compras.
Soriana exige frenar agresiones y publicidad negativa en contra de esa compañía, misma que afecta su imagen utilizando mentiras y argumentos sin sustento… las imputaciones que han hecho en contra de nuestra organización sin tener un solo elemento de prueba fehaciente, han generado una animadversión injusta hacia nuestro personal y operación comercial."
A lo que respondió AMLO en Twitter:
"Los dueños del PRI pensaron que podrían comprar la presidencia y ahora su dinero ilícito los está desnudando. No me culpen a mí. Serénense."
La irresponsabilidad de Soriana en el proceso electoral, en un país democrático le valdría severas multas y castigos y una ola de desprestigio comercial que, en México y su mundo político empresarial del revés, Soriana recibe apoyo de los medios masivos de comunicación, de sus voceros y los 'hombres de negocio', como si la empresa fuera una tienda 'ancla' de la democracia y no la vergüenza histórica que está detrás.
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