México unido contra el tráfico de influencias

Juan Camilo Mouriño organizó como diputado y como co-presidente, una red de tráfico de influencias que -al menos-, le dio para firmar más de 100 contratos en beneficio de la empresa familiar Ivancar. Según Wikipedia "la palabra delito deriva del verbo latino delinquere, que significa abandonar, apartarse del buen camino, alejarse del sendero señalado por la ley." Felipe Calderón, La República de la Televisión y el "gallego" Mouriño no solo se han "apartado del buen camino", han desestabilizado al país, lo tienen en la antesala del colapso social y con la soberanía al sexoservicio de las compañías trasnacionales. Los tres, "haiga sido como haiga sido", son delincuentes confesos.

Felipe Calderón Hinojosa, no conforme con robarse una elección presidencial, intenta aniquilar el Movimiento de Resistencia Civil Pacífica utilizando el tema y el calificativo del "secuestro". El principal Vocero al servicio del régimen ilegítimo es Joaquín López Dóriga, en la boca del (anti)comunicador se articula el frente discursivo y las estrategias de Los Pinos. Joaquín es "el carnicero" de Chapultepec 18 y merece la condena máxima de un mentiroso desenfrenado: la pérdida total de la credibilidad.

En el 2004, un grupo de ultraderecha afiliado al Yunke organizó la primer ofensiva mediática del miedo contra Andrés Manuel López Obrador. Fue la "marcha blanca" en contra de la inseguridad y la violencia; aquella vez, los empresarios que organizaron la marcha pagaron una campaña en medios nacionales donde hombres y mujeres mutilados reclamaban con lágrimas en los ojos el fin de la violencia en la ciudad de México. Pedían el "orden" a partir del caos. Lo mismo que están pidiendo ahora. México unido contra la delincuencia es una organización ciudadana ligada a las cúpulas empresariales que financiaron el fraude y ahora, con una "trampa" política inhumana como el secuestro, intentan doblegar a Marcelo Ebrard para que vaya a Los pinos y se tome una polaroid con el "pelele" presidencial de México.

La "marcha" contra la inseguridad es también una respuesta política de la derecha criminal a la Consulta Popular en contra de las iniciativas del Presidente Espurio para convertir a México en Colonia. El 31 de agosto, Andrés Manuel López Obrador, Presidente Legítimo de México, está convocando a todos los miembros del gobierno legítimo y a los ciudadanos que se oponen a la quiebra de México a manifestarse en las plazas públicas de los distintos estados del país. La marcha de la cúpula yunkista será el sábado 30, ¿Qué manifestación política monopolizará los titulares de la prensa monárquica? La Marcha contra la inseguridad y la violencia. Los demás, (como ya es costumbre) seremos "los desaparecidos".


Helio Flores/El Universal